La casa Antonin Rodet ha sido sinónimo de Mercurey desde 1875, cuando fue creada por Antoine Rodet, dit Antonin. Su padre, François, tendero en Chalon-sur-Saône y astuto comerciante, se hizo cargo muy pronto del negocio de corredor de vinos; Chalon-sur-Saône en ese momento era el centro del comercio del vino. La ciudad, en el siglo XIX, con la llegada del ferrocarril asociado al tráfico fluvial, experimentó un importante auge económico. Por lo tanto, el joven Antoine aprendió muy temprano el funcionamiento del oficio que sacudió su infancia. Pero fue su matrimonio con Marie-Françoise Adenot, hija de granjeros asentados cerca de Mercurey, lo que selló los cimientos de la futura bodega Antonin Rodet, ya que la herencia territorial de la joven permitió a Antoine beneficiarse de un terreno considerable y servir de marco para su nuevo negocio. En los años siguientes, su herencia siguió creciendo, a pesar de la inmensa crisis de la filoxera que se apoderó del viñedo de Borgoña.

Cuando Antoine murió en 1905, uno de los hijos nacidos de esta unión, Antonin, adoptó la visión pionera de su padre y continuó con mano maestra la obra realizada por él, como lo demuestra su fama. . La casa de Antonin Rodet era entonces una casa de vinos floreciente y en expansión. Viajero de comercio desde los 16 años, Antonin tiene una experiencia de “campo” que podrá utilizar para elevar la casa de Antonin Rodet al nivel internacional. Su juventud y su dinamismo serán los principales activos en el desarrollo comercial y la notoriedad de sus vinos.

De sucesión en sucesión, si la familia ya no está al frente de la empresa hoy, el espíritu de Antonin, visionario como su padre y ardiente defensor de esta tierra al sur de Borgoña a la que dedicó su vida, sigue muy presente.

Nuestro estilo

Anne-Laure Hernette, que preside la producción de los vinos de Antonin Rodet como “enólogo” desde la primavera de 2013, brinda un cuidado atento a toda la gama. Su compromiso desde la viña hasta el embotellado asegura la calidad de nuestros vinos que han construido la reputación de nuestra Casa a lo largo de los años. El estilo de los vinos de Antonin Rodet combina finura, elegancia y placer respetando las características de cada uno. Nuestros blancos destacan por su pureza y armonía, mientras que nuestros tintos destacan por su bella estructura y fuerte potencial aromático.

Nuestros vinos

 

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Château de Mercey

Los vinos blancos tienen un color verde dorado brillante con reflejos gris plateado. En nariz revela delicados aromas cítricos, mentolados y especiados. En boca los vinos son refrescantes, con ligeros mentolados, desarrollando sabores tostados que evolucionan con matices de bollería dulce y mazapán. Su estructura es a la vez elegante y firme.

Los vinos tintos poseen un fino color rojo rubí intenso. La nariz se abre con notas de frutos rojos. En boca recuerda aromas de sotobosque con recuerdos a pimienta y frutas. Los vinos son finos y con cuerpo.

Château de Rully

Los vinos blancos tienen un color dorado intenso. Encapsulan aromas clásicos como avellanas, acacia, madreselva, violeta y cítricos con un toque especiado. El paladar de estos vinos es con cuerpo, delicado y mineral. Los vinos son expresivos, especiados y suaves al mismo tiempo. Suelen evolucionar hacia notas de frutos secos y miel.

Los vinos tintos tienen un color rojo púrpura, con aromas a violetas, frambuesas, cerezas y lilas. En boca se caracteriza por un buen equilibrio taninos/fruta/estructura y ofrece un sabor suave afrutado y mineral.

La Casa Antonin RODET al servicio de los terruños

“Compartir la cultura de nuestra casa. Enseñar a los amantes del vino aficionados a reconocer las características específicas de cada clima y variación climática. Descubrir los terroirs de Borgoña”.

Anne-Laure Hernette, vinicultora

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